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La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. continúa contribuyendo a garantizar la seguridad de la fórmula infantil en polvo a raíz de los informes de infecciones por Cronobacter sakazakii en cuatro bebés lo que pudo haber contribuido a la muerte de dos pacientes.

Esos informes dieron lugar a una investigación de la FDA sobre Abbott Nutrition en Sturgis, Michigan. Las condiciones insalubres encontradas en las instalaciones llevaron al retiro voluntario en febrero de 2022 de lotes específicos de fórmula infantil en polvo fabricada en las instalaciones y se puso de manifiesto un tipo de bacteria de la cual es posible que muchos padres no hayan oído hablar antes. Los científicos continúan trabajando para comprender qué ocurre.

Si bien la contaminación y las infecciones por Cronobacter son raras, es importante conocer los riesgos y lo que puede hacer para minimizarlos.

¿Qué es el Cronobacter?

El Cronobacter es un microbio (bacteria) que se encuentra en el medio ambiente de forma natural. El Cronobacter puede subsistir en casi cualquier superficie, en especial en alimentos secos, como fórmula infantil en polvo, leche en polvo, tés de hierbas y féculas.

El Cronobacter es inofensivo para la mayoría de las personas y las infecciones son raras. Cuando ocurren, pueden poner en peligro la vida de los bebés, en particular de los menores de dos meses, prematuros, inmunodeprimidos o de bajo peso al nacer.

¿Cómo se contamina la fórmula infantil en polvo con Cronobacter?

Es posible que los padres no sepan que, si bien los fabricantes de fórmula infantil en polvo deben producir fórmulas sin bacterias dañinas como el Cronobacter, las fórmulas en polvo —a diferencia de las fórmulas líquidas— no reciben ciertos tratamientos de procesamiento que las volverían estériles.

El Cronobacter tiene el potencial de ingresar a fábricas, hogares y hospitales en las suelas de los zapatos o en las manos y luego puede vivir en superficies como mostradores o biberones.

En la fábrica, el Cronobacter podría entrar en la fórmula en polvo si:

• Los ingredientes que se utilizan para hacer la fórmula están contaminados.
• La fórmula en polvo toca una superficie contaminada.

En el hogar, los bebés pueden infectarse con Cronobacter a través de múltiples vías, que incluyen:

• Accesorios, biberones y otros utensilios utilizados para la alimentación del extractor de leche no desinfectados adecuadamente.
• Lavado de manos inadecuado antes de la preparación de la fórmula infantil.
• Tapas o cucharones de fórmula colocados en superficies contaminadas, como encimeras o fregaderos, que luego entran en contacto con la fórmula.
• Agua contaminada utilizada para mezclar la fórmula.

¿Por qué es difícil encontrar la fuente de contaminación por Cronobacter?

El Cronobacter sakazakii y sus parientes en la categoría más amplia de especies de Cronobacter son parte de una gran familia de bacterias que son comunes en el medio ambiente, como en nuestros patios, cocinas y salas de estar, por lo que identificar la fuente específica de una enfermedad o brote puede ser un desafío.

Es importante destacar que solo un estado en los EE. UU., Minnesota, actualmente requiere que los casos de Cronobacter sakazakii se informen a las autoridades estatales de salud pública. Como resultado, muchos casos no se informan y los científicos tienen información limitada sobre la composición genética de las bacterias que se encuentran en los casos que se informan. Para brindar cierta perspectiva, la base de datos del Centro Nacional para la Informática Biotecnológica (NCBI, por sus siglas en inglés) que rastrea estos patógenos ha recibido aproximadamente 480,000 envíos de información genómica para cepas de Salmonella enterica en comparación con solo 1086 envíos para cepas de Cronobacter.

¿Qué puede hacer para minimizar el riesgo de contaminación por Cronobacter?

Preparar y almacenar la fórmula infantil en polvo de forma segura

En la mayoría de los casos, es seguro mezclar fórmula infantil en polvo siguiendo las instrucciones del fabricante. Si su bebé tiene menos de 2 meses, nació prematuramente o tiene un sistema inmunitario debilitado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan usar fórmula infantil lista para utilizar. La fórmula infantil líquida está hecha para ser estéril (sin microbios) y es la opción más segura para los bebés que no reciben leche materna. Sin embargo, también puede tomar medidas adicionales para preparar fórmula en polvo para estos grupos de bebés usando agua caliente (al menos 158 °F/70 °C) para ayudar a proteger contra Cronobacter y luego enfriar la fórmula antes de alimentar a su bebé.

Sin embargo, ciertos productos metabólicos y especiales incluyen declaraciones en sus empaques que advierten a los consumidores contra el calentamiento porque calentar el producto en particular por encima de los 100 °F podría resultar en una pérdida de vitaminas y nutrientes. Por lo tanto, los cuidadores deben tener especialmente en cuenta las instrucciones del fabricante incluidas en el empaque de las fórmulas metabólicas especiales. Si las instrucciones impiden que un consumidor caliente su fórmula a por lo menos 158 °F, entonces los cuidadores deben llevar el agua utilizada para mezclar la fórmula a la temperatura corporal y seguir las instrucciones en esta infografía imprimible para preparar y almacenar la fórmula infantil en polvo de manera segura.

Los padres que sospechen que su bebé se enfermó debido a la fórmula infantil pueden llamar a la línea directa para consumidores de la FDA al 1-800-FDA-1088.

Otros consejos para minimizar el riesgo de contaminación por Cronobacter

Los bebés también pueden estar expuestos al Cronobacter a través de extractores de leche sucios o biberones sucios. Para ayudar a mantener seguro a su bebé, puede ayudar a evitar que Cronobacter crezca en estos objetos. Mantenga seguros los alimentos de su bebé, ya sea leche materna o fórmula, limpiando, desinfectando y almacenando cuidadosamente los biberones y las piezas del extractor de leche.

También es importante lavarse las manos con agua y jabón, especialmente antes de preparar los biberones y la alimentación. Los CDC también recomiendan usar un desinfectante de manos a base de alcohol con al menos un 60% de alcohol.

¿Cuáles son los síntomas de la infección por Cronobacter?

Los síntomas de infección en los bebés pueden comenzar con fiebre, mala alimentación, llanto excesivo y/o muy poca energía. Algunos bebés también pueden tener convulsiones. Los bebés con estos síntomas deben ser llevados a un proveedor médico lo antes posible.

¿Qué más debo saber?

Si tiene preguntas o inquietudes acerca de la contaminación o infección por Cronobacter, comuníquese con su profesional de la salud.