Comentarios del Presidente Barack Obama Mensaje Semanal La Casa Blanca 12 de noviembre de 2016

Hola a todos. Este fin de semana, mientras buscamos maneras de reconciliar nuestras diferencias, debemos tener en cuenta los principios que perduran más allá de la política. Y podemos ver algunos de los mejores ejemplos en los hombres y mujeres a los que rendimos homenaje ayer y cada día del año — nuestras tropas y nuestros veteranos.

Es el ejemplo que nos dieron los jóvenes estadounidenses — nuestra generación del 11 de septiembre — quienes, como personal de respuesta inmediata corrieron hacia las torres en llamas, acudieron a un centro de reclutamiento y se alistaron para servir a su país.

Es el ejemplo que nos dan nuestros militares, que cumplen cada misión, un equipo unido,  cuidándose los unos a los otros, y respaldándose el uno al otro.

Es el ejemplo que nos da la institución más diversa de nuestro país — soldados, marinos, pilotos, marines y guardacostas que representan cada rincón de nuestro país, todos los matices de la humanidad, inmigrantes y nacidos en los Estados Unidos, cristianos, musulmanes, judíos y no creyentes por igual, todos unidos al servicio de nuestro país.

Es el ejemplo de los veteranos — patriotas — quienes, al colgar los trajes de faena, se ponen de nuevo su camuflaje de la vida cotidiana de los Estados Unidos; convirtiéndose en nuestros jefes y socios de negocios, nuestros maestros y entrenadores, nuestro personal de respuesta inmediata y miembros de los concejos municipales y modelos a seguir en nuestros vecindarios, todo ello mientras siguen sirviendo a este país que tanto amamos con el mismo sentido de deber y valor.

Nuestros veteranos no siempre cuentan historias de su heroísmo. Así que depende de nosotros preguntarles, escucharlos, contar esas historias por ellos e incorporar a nuestras vidas los valores por los que ellos estuvieron dispuestos a sacrificar las suyas. Tenemos que armarnos del mismo valor y humildad que demuestran nuestros veteranos y de reconocer que nunca podremos servirles de la misma manera de la cual ellos nos han servido.

Pero podemos intentarlo. Tenemos que seguir esforzándonos para asegurarnos de que siempre reciban la atención y los beneficios que se merecen. Podemos ser generosos. Podemos ser voluntarios, servir, y respetarnos el uno al otro. Podemos siempre respaldarnos los unos a los otros. Y podemos demostrar lo mucho que amamos a nuestro país amando a nuestros vecinos como a nosotros mismos.

A todos aquellos que han servido y a los que lo siguen haciendo: gracias. Y que tengan un buen fin de semana.

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